Cuando hablamos de construcción podemos pensar en varias de sus verticales, como puede ser el anteproyecto, en el que se realiza la generación de planos y especificaciones, o el proceso de costear el proyecto con la generación del presupuesto con precios unitarios y hasta la administración de la venta del o los inmuebles construidos. Sin embargo, en esta nota nos centraremos en la vertical referente a la administración de la ejecución de la obra, el hecho de llevar a cabo la construcción en sí, a colar una cimentación, colocar los ladrillos para levantar un muro o hacer las instalaciones de eléctricas, entre muchas otras.
Los sistemas que han intentado administrar y/o controlar esta vertical de la construcción y su ejecución de la obra han sido víctimas del mismo proceso bajo el cual se hace llegar la información a estos sistemas, el proceso es el siguiente:
Primero, asistimos a la obra con papel y lápiz, presupuesto y planos para hacer el levantamiento de avance de obra, posteriormente llegamos a nuestro escritorio y transcribimos esta información a archivos de excel, donde se consume tiempo y potencialmente se cometen errores, y por último se importa este archivo al sistema que pretende “controlar” u “organizar” la información al concentrarla en un solo lugar y ser consultada por los interesados.
Antes de expresar el problema, se aclara que todo sistema enfocado en controlar la obra debe tener como premisa número uno: obtener la información de lo que sucede en el sitio de la construcción a tiempo, sin errores y de forma sencilla de leer; por lo tanto, debido a el proceso explicado en el párrafo anterior, el 99% de los sistemas para la administración tienen un problema de origen que no han resuelto y esto causa que no puedan cumplir con la premisa número uno: su información se origina en papel y lápiz para sufrir una serie de re trabajos antes de llegar al sistema, haciendo que la información sea poco oportuna y confiable.
Al persistir este proceso de captura de información, persistirá el problema sin importar el sistema con el que se cuente y el constructor se enfrenta a un sobre costo provocado por reportes y pagos duplicados, tiempo perdido en reportes manuales y robo de materiales.
Pero la solución existe y se llama SALI, el Sistema de Avance en Línea convertido en la herramienta tecnológica que aporta la mejor solución logrando tres cosas: digitalizar la información desde el origen en el sitio de la obra con su aplicación móvil, recibiendo dicha información en la plataforma web al minuto uno de terminar el registro de avance de obra y que esta se concentre en tableros y reportes sencillos de leer, asegurando su veracidad. De esta manera se elimina el papel y el lápiz para pasar a la era de la información digital.
El software ideal sí existe: SALI, una plataforma digital para la construcción de hoy.
Comments